ALLA EN EL RANCHO GRANDE DONDE YO VIVIA.

 ALLÁ EN EL RANCHO GRANDE DONDE YO VIVÍA

También recuerdo compartir con el tío Heberto Do mnguez que vivía en Coco Sólo con nosotros, si el tío hoy está cumpliendo 94 y yo estoy en los 72 quiere decir que tenemos una diferencia de 22 años, si en ese recuerdo yo tendría tres años el tío e astaba en los 25. Una etapa maravillosa en esa finca con nuestros padres y amigos, es el tío más parecido a mi padre Enrique, de hecho también fue como su padre y se chupo la disciplina militar de mi querido viejo, fue muy estricto y por eso también le hacían maldades. Un tío muy especial con el con el que compartí muchas vivencias en el pueblo, montó una tienda de víveres en la esquina de la casa de mi abuelo Octavio donde yo vivía y junto con mi hermana Rosaura le ayudábamos en la administración, solía viajar todas las semanas a Barranquilla a comprar los víveres de la tienda y casi siempre llegaba tomado, yo era un muchacho estudiante de la primaria y pasaba metido en la tienda, recuerdo mucho términos que se usaban,  a mi, cinco y cinco, me da la ñapa de panela, me pude gozar esa etapa, casi siempre me tocaba cerrar a las 9 de la noche cuando escuchaba la última canción del teatro Palermo porque estaba a tres cuadras de la plaza principal, no me perdía de ninguna película así la repitieron toda la semana pues entraba gratis, mi padrino Domingo  Osorio era el dueño del teatro y su hijo Guayacan era mi llave. El tío Heberto muy pintoso y conquistador, tenía buen ojo para conquistar lejos de su querida esposa Santos de la Cruz, tan especial y tan celosa que en varias ocasiones lo cortó con un cuchillo. Vivió una temporada en Gaira