EDITORIAL.
LA INTOLERANCIA COMO FACTOR DE PERTURBACIONES DEL ORDEN PÚBLICO.
Los efectos de la pandemia repercuten en el comportamiento de las personas mostrando conductas inusuales reprochable bajo todo punto de vista. Casos puntuales que causan mucha indignación en la sociedad colombiana , uno donde un médico denuncia una perturbación de su tranquilidad y personalmente junto con la autoridad se enfrentó a los agresores recibiendo una descomunal golpista reprochable bajo todo punto de vista, primero porque la injustificada agresión se dio a dos mujeres indefensas y segundo que tan sólo con un poco de libertad para esta cuarentena el abuso de la gente en fiestas muy concurridas en sitios que normalmente están prohibidas, la propiedad horizontal tiene sus propias normas de convivencia. El segundo caso es el más reprochable, la agresión brutal , yo diría bestial de parte de los agentes de la Policía cada uno con un artefacto eléctrico usado para controlar y someter a los delincuentes acaban con la vida de un joven abogado que estaba violando los protocolos de la cuarentena , de parranda con unos amigos, las imagen de horror han causado mucho impacto en la sociedad, sus voces de clemencia no escuchadas por los agentes es lo que causa más indignación, como el peor delincuente fue vilmente asesinado el joven abogado infractor de la ley. Se me vino a la mente la voz del presidente de la Corte Suprema de Justicia el Dr Echandia cuando pedía que se suspendiera el fuego en la toma del Palacio de justicia. Todo esto es fruto de esos miedos y pánico fruto de esta pandemia, los dos casos son reprochables, tanto el de los civiles como el de las autoridades que imponen el orden, lamentablemente la Policía Nacional está pagando los platos rotos, acciones de agentes fuera de control le causan un enorme daño a la institución, voces de protesta en todo el pais, mucho vandalismo aprovechando para fomentar el caos, no hay derecho a culpar a la Policía Nacional, sería como el hecho perpetrado por los civiles en Barranquilla los pagara toda la ciudadanía.Un llamado a la sensatez y a la cordura, las protestas desaforadas son aprovechada por la delincuencia para hacer de las suyas. La intolerancia se está multiplicando en esta cuarentena, ayudemos a calmar los ánimos #Sigamosencasa.
  

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