NUESTRA REALIDAD COLOMBIANA Y EL LOGRO DE LA PAZ.

Alejandro Cesar Dominguez Cervantes El maravilloso mundo en que vivimos, si lo que llamamos cielo es un espacio infinito nos parece hermoso, nuestra galaxia es una mas de las millones del universo; que haría el hombre de la tierra si tuviera la oportunidad de teletransportacion y recorrer millones de kilómetros en fracciones de segundo, pensar en eso me hace sentir mas humilde, somos un granito de arena ante el universo circundante y nos creemos unos nom plus ultra, el grande es el creador de ese bello universo, como lo quieran llamar, es un ser superior que en las diversas culturas le ponen un nombre, todos coinciden en que es un ser muy especial, otros niegan su existencia y se aferran a teorías extrañas, que importa quien haya creado el universo o si se formo solo, lo mas importante es saber que existe y que es maravilloso y que nosotros somos hormiguitas y que hormiguitas cizañeras, dentro de esas hormigas han salido grandes genios, seres maravillosos que han luchado por el progreso de la humanidad, a ellos le debemos el progreso, esto que estamos haciendo hoy en las redes sociales, la Internet, la intercomunicación con el mundo entero, es algo maravilloso.Cuando hago este ejercicio mental me pongo a pensar en mi querida Colombia, bella tierra de grandes paisajes, ciudades hermosas, bellos y pintorescos pueblos, gente maravillosa que la habitamos, sin embargo porque tanta violencia, ante el mundo somos unos bárbaros, no hemos podido vivir pacíficamente, quien tendrá la culpa , nuestro sistema excluyente, el dominio de los poderosos, el afán de lucro de los grandes terratenientes, llevamos mas de 50 años en una guerra intestina, que no se nota tanto porque solo la padecen los que viven en el campo, vivimos una época del narcotrafico muy horrorosa, todo ha ido cambiando, se va transformando en otro tipo de violencia; creo que desde los inicios de la República se abrió la brecha de la violencia, esos padres de la patria : Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander , consiguieron librarnos del yugo español , pero a que precio, el dominio del poder , cada uno por su lado en una rivalidad permanente, centralismo y federalismo , sistemas de gobierno diferente para un Estado naciente, luego surgen los partidos políticos; Liberales y Conservadores , cual seria el mejor , quien sabe, hubo una gran guerra civil , fue la primera que tuvimos, liberales y conservadores en disputa del poder del Estado, que violencia espantosa, millones de cadáveres pasaban por el Río grande de la Magdalena, las aguas de turbias cambiaron a rojas, como el mar rojo, muchos mutilados, sin brazos , sin cabezas, el horror mas grande del mundo y esto no salia a la luz de las noticias, no había ni radio, escasamente el telégrafo, pónganse a pensar en esta época de las redes sociales, se habló de una época de la hegemonía Conservadora, muchos años domino el partido conservador, la mayoría de los presidentes eran generales, el partido conservador se caracterizó por ser muy dominante. Así que nuestra historia esta plagada de violencia, violencia secular difícil de acabar mientras los poderosos se aferren al poder del Estado para seguir dominando y mientras no se le preste atención al campo, las tierras deben ser para el campesino, pero en Colombia tenemos mas del 50 por ciento de campesinos sin tierra, creo que es mucho mas, pensar que los actuales dueños del otro 50 por ciento son personas ajenas al campo y orgullosamente dicen tener 1000 hectáreas o más, tierras que permanecen vírgenes, ni siquiera le alcanza el día para recorrerlas, mientras el pobre campesino se contenta con sembrar una hectárea; me pregunto puede haber paz, claro que si, si nos proponemos una gran reforma agraria, porque nuestro conflicto armado es mas que todo una protesta por el mal reparto de la tierra.
Por estos días se ha negociado la paz con una parte de la guerrilla , todavía quedan reductos fustigado a los campesinos y matando líderes comunitarios , se alían con los los narcos , alianzas perversas que le hacen mucho daño al país, cuando ya todos pensábamos que reinaría la paz ahora hay más que incertidumbre , de nada ha servido la jurisdicción especial de paz y el aumento desproporcionado del poder judicial cuando los tribunales se congestionan por falta de presupuesto , cantidad de procesos estancados , todo este sacrificio a costa del logro de la verdadera paz. Tal parece que la guerra no termina , seguimos en la secular violencia , parece ser nuestro destino final...!

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