EL TIO HEBERTO DOMINGUEZ ALMARALES

EL TIO HEBERTO DOMINGUEZ ALMARALES.
Hoy está de cumpleaños , uno de los menores de los hermanos Domínguez Almarales , los hijos de Enrique Dominguez de la Cruz y Luciana Almarales Guzmán en Sitionuevo. Una numerosa familia que día se multiplicaba , ese apellido Domínguez cómo ha crecido , los nueve varones salieron muy buenos con el machete, a los que mas le rindió con la misma pareja fue a mi padre 12 hijos y al tío Adolfo creo que son 16 , el que más tuvo hijos fue el tío Rogelio , llegando a los 30 hijos con diferentes mujeres.
Hace muchos años el tío Heberto vivió con nosotros en la finca Coco Solo , yo era muy pequeño , me acuerdo mucho que siempre se me antojaban  sus utensilios para comer , cogía unas rabietas y terminaba mi padre azotandome con su correa , al final me complacian, desde pequeño fui muy rebelde , a veces eran causas justas como cuando se me antojaban dos panes a la hora del desayuno , solo teníamos derecho a un solo pan, el otro después de los correazos. Tiempos difíciles de nuestra niñez, familias numerosas en medio de tanta pobreza. El abuelo Enrique cuando cumplió los 50 se retiró de la vida laboral , sus hijos mayores terminaron de criar a los menores , mi padre fue un padre para ellos , siempre los ayudaba. Muchos años después de la muerte de mi padre , era yo un niño estudiando la primaria , el tío montó una gran tienda en la casa del abuelo Octavio, con mi hermana Rosaura  le ayudabamos a administrarla , muchos créditos sin respaldo terminaron arruinando la tienda.
El tío Heberto una persona muy especial, amiguero servicial como mi padre , siempre con una gran carcajada en su boca , la más parecida a la de mi padre , de hecho guarda mucho parecido con ese hermano que le fregó tanto la vida en su juventud , me preocupa cuando ya llega a los 90 , cómo pasa de rápido el tiempo , sin darme cuenta también estoy avanzado.
Feliz cumpleaños tío , que el padre Celestial le prolongue sus días en buena salud y en buena compañía de su bella familia. Siempre andaba por el pueblo en una bicicleta oxidada, cadena sin engrasar, había que hacer mucha fuerza para pedalear, me gozaba mucho el cuento de mi vecino César Jeserum que visitó el pueblo con el Dr Omar Dominguez y el tío le prestó la bicicleta para recorrer el pueblo, duró varios días con mucha dolencia en las piernas.