EL PROYECTO CUMBIANA

EL PROYECTO CUMBIANA
Que bueno mostrar al mundo la existencia de un bello paraje sembrado en medio de las mansas aguas de una gran ciénaga , un pueblo palafito construido con el mayor encanto de una comunidad de pescadores que por muchos años llevan una vida anfibia, casas construidas sobre estacas de maderos incrustados en el fondo de la ciénaga del Pajaral , una vida diferente al común de la gente, vivir aislado de la tierra y encontrar en ese mar muerto los medios de sustento y maravilloso vivir , respirando aire puro sin la contaminación ambiental , donde el único ruido es el salpicar del canalete y la palanca usados para desplazarse en las canoas, único medio de transporte usado para movilizarse de un lugar para otro. Una cultura completamente diferente que nos enseña una vida pacífica, todos se conocen, todos viven y disfrutan de esa vida maravillosa en ese oasis de la ciénaga, comiendo pescado acabado de pescar. LLama mucho la atención sus pintorescas casas cual gigantes casas navegantes dispuestas en forma de gigante corazón nos da la sensación de un gran palpitar donde se puede apreciar salir y ocultar el sol adornado con bellos paisajes que las nubes multicolores dibujan en el espacio sideral. Decir hermoso es quedarse corto , poder describir con precisión el encanto de este bello pueblo sembrado por muchos años en las mansas aguas terciadas del río y del mar, hace muchos años tuvo su esplendor, cantidad de peces sacados con atarrayas, ofrecían un gran porvenir y una vida próspera a sus habitantes, poco a poco se fue terminando la bonanza, cuando construyeron la vía Barranquilla Santa Marta, cortaron el flujo y la proporción de la mezcla ideal del agua del mar Caribe y la del Río Grande de la Magdalena, fue el llamado mayor desastre ecológico causado por el hombre colombiano, muchas especies desaparecieron, manglares, peces y mariscos que nunca más volvieron, se podía vivir plácidamente de la pesca. Hoy la vida en este bello paraje sigue siendo un gran milagro, el 2020 recuerda que hace 20 años se produjo la peor masacre producto del conflicto armado, en la plaza principal montones de cadáveres arrumados como leña para alimentar los tendales, miles de humildes pescadores sacrificados por estruendosos disparos de fusiles y metralletas, luego por varios años fue abandonado el pueblo,los horrores de la guerra intestina que nos sacude todavía , sin aprender a vivir pacíficamente, las balas silencian a las comunidades abandonadas por el Estado que solo hace acto de presencia cuando el mal está consumado, nada justifica estos ataques bárbaros, todavía en pleno siglo XXI sigue la lucha armada, las masacres de los pueblos indefensos , 20 años se cumplen de esa gran injusticia contra una comunidad pacífica cuyo único pecado es vivir de la pesca. Muchos proyectos extranjeros con la mirada puesta sobre esta bella comunidad de pescadores, aún al propio Carlos Vives le pareció interesante, ojalá que se un éxito y sirva de promoción para que el mismo Estado ponga sus ojos y destine recursos para recuperar la vida productiva de esta bella comunidad sembrada en en medio del gigante lago. Personalmente no le conozco, a pesar de haber saboreado y disfrutado su buena pesca cuando en mi niñez vivía con mis ancestros en Sitionuevo , el tio Tito Mendoza, hermano de mi abuela le enviaba las mayores Lisas y CHivos que mi abuela asaba en parrilla doble.            

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